RELATO:El lobo

Andaba divagando,de un lado a otro,con las pezuñas mojadas , manchadas por el barro, entre la maleza y los ramajes viejos que dejó la lluvia constante de la noche pasada. 

Sufría cuando el sol comenzaba a esconderse , sufría cada uno de esos constantes , anaranjados destellos .

 Yo seguía esperando con gran hambre, recordando una y otra vez tú imagen,

aquel encuentro perdido hacia ya tiempo.

Pero por fin, las fiestas del pueblo, llegaron. De nuevo,sabía y me convencí  que realmente era un lobo moderno, que no hice nada malo, que no era responsable de todo aquello por lo cual me acusaban y me perseguían , siempre fuí bueno.

La noche estaba clara de luna,

desde la escarpada montaña, en la distancia, mis ojos oscuros , apreciaban las luces rutilantes de la feria,los autos de choque,la pequeña noria, la plaza estaba llena .

- ¿me recordará?, ¿estará?,¿seguirá viniendo este verano?.

Esa noche picaba de calor .

Tenia que decirle que la echaba de menos, que lo dejé todo por ella, decirle que fue todo un mal entendido.

Bajé poco a poco, agachado,reptando, nadie pudo verme,era mi naturaleza.

Había todo un plantel de chicas hermosas queriendo ser comidas.

Al dar la vuelta,entre la caseta de la churrería y el grupo electrógeno, la vi, encontré de nuevo a mi amada,se erizó mi hirsuto pelo negro.

Sigilosamente, sin que nadie pudiera verme, tragando saliva,me puse muy cerca de ella , amainé las ansias de abalanzarme sobre ella y la llamé por su nombre, la saludé.

Giró la vista y se estremeció.Poco a poco,notaba su miedo,sin querer, se fue acercando.

Estábamos solos, nadie podía vernos.

-hola lobo, ¿que haces tú por aquí?

- ya ves, veo que sigues recordándome...

- claro que sí lobo, nada personal, ¿pero que has hecho durante todo este tiempo? no supe nada más de ti.

- no terminó muy bien lo nuestro, ¿ recuerdas?. Tengo que decirte que te echo de menos, te veo muy cambiada.

- ya es tarde, perdiste tu oportunidad lobo, hubieras tenido que comerme cuando tuviste la oportunidad o tal vez hubiera tenido yo que haberme dejado comer.

Tengo que dejarte, lobo, rompiste mi frasco de amor.

Dió media vuelta y se alejó. La multitud y los gritos hundieron su imagen a lo lejos, hasta que dejé de verla.

La dejé marchar y definitivamente ,lo perdí todo, simplemente y quizá por querer ser un lobo bueno.